El presupuesto de tesorería: como gestionar el superávit/déficit de efectivo
En el caso de que se prevea un momentáneo superávit de efectivo dentro de la gestión diaria, la empresa puede estudiar con tiempo la mejor forma de colocación de dicho efectivo en el mercado financiero ya que mantener saldos ociosos supone incurrir en un coste de oportunidad por la pérdida de los intereses o beneficios derivados de la inversión.
En el caso de que se prevea un déficit de liquidez dentro de la empresa, ésta puede efectuar con antelación suficiente la mejor forma de proceder a su financiación o corrección ya que generalmente los déficit suelen tener un coste alto.. Para evitarlos, la empresa puede estudiar la reducción de su fondo de maniobra (mejorando su nivel de inventario, un menor saldo de clientes o un aumento del saldo de proveedores). Otra posible solución sería la búsqueda de financiación adicional al corto plazo para cubrir el déficit con la obtención de créditos a corto plazo, el uso de descubiertos en cuenta corriente o la negociación de efectos.
En definitiva, el presupuesto de tesorería es un elemento fundamental para determinar la posición de efectivo a corto plazo de la empresa y, por tanto, planificar sus necesidades de liquidez y poder anticipar su financiación. También es importante para determinar el nivel mínimo de liquidez que es necesario mantener para realizar el ajuste de los flujos monetarios.